La gran caja de un gran bloque, dedicado para los actos comerciales.
Hay un mozuelo que maneja la gran caja, con mucha sutileza, y para la gran caja, en los pisos que los pasajeros quieran.
Al amanecer, un hombre de negocios entra en la caja, el hombre era de gran estatura, con un maletín de piel, y parece que lleva unos documentos, muy importantes.
Por ahora no hay abundante gente que haya entrado en la cabina. El mozuelo, va parándose en cada planta, y abundantes personas salen y entran de la cabina cableada.
Mientras que el importante hombre, se queda clavado en su sitio, con su elegante sombrero, bien puesto.
Al establecerse en la última planta, solamente estaba el mozuelo y el hombre.
Y dice el mozuelo.
-¡Ultima planta!
-Dice el mozuelo-
Pero el caballero, indica que no se va a bajar, y se queda en el ascensor.
El maquinista de la caja, coge el mando, y baja silenciosamente.
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